El sexo es una de las materias centrales para el reglamento de la Biblia. En este episodio descubriremos las normas más sorprendentes, como la que impedía a la mujer agarrar de los genitales a un hombre para defender a su marido en una pelea. Si la incumplía, se le cortaba la mano. Hoy en día esto suena monstruoso, pero una vez empezamos a comprender el mundo en el que aquella ley se dictó, analizando todo desde las estatuas griegas hasta las tasas de mortalidad, tendremos una nueva visión de cómo eran las relaciones sexuales hace 3.000 años.