El dolor está muy presente en nuestras vidas, desde que nacemos hasta que morimos, y por eso es un tema tan recurrente en el arte. Para hacer este viaje hacia la parte más oscura de nuestra alma, nos situaremos en el vehículo donde se genera más dolor: en una cama. Una cama con la que recorreremos los diferentes aspectos de esta emoción tan negativa pero, a pesar de todo, tan necesaria para crear. Analizaremos la vida y obra de varios artistas que pasaron por la experiencia del sufrimiento: Frida Kahlo, que apoyó tanto dolor, físico y emocional, y que tan bien supo plasmar en su obra; Frédéric Chopin, enfermo de tuberculosis, que supo expresar su angustia vital en sus composiciones musicales, las mejores escritas en una celda de la cartuja de Valldemossa; o Antoni Tàpies, que tuvo una enfermedad pulmonar y llegó al convencimiento de que vivir con dolor es necesario e inevitable.