Poco tiempo después de que Gwenda se haya mudado a su nuevo hogar, empiezan a suceder hechos extraños. A pesar del esfuerzo realizado para reformar la casa, las imágenes del pasado vuelven para perturbarla: cada vez que sube las escaleras siente un terror irracional. Muerta de miedo, recurre a Jane Marple para que la ayude a evitar los fantasmas del pasado. Entre todos deberán solucionar un crimen "perfecto" ocurrido muchos años atrás.